Genial, Lala!!!! Otra buena noticia para celebrar!!!!

Y por seguir con el tema de mascotas

(ayns, qué sustos nos meten a veces, es que nos quitan la vida!!!) os cuento que Jara, la perra de mi costillo, nos pegó hace unos días el sustazo padre.

Pasábamos el día en la finquita de mi mami cuando de repente vemos que se está zampando algo.

Y como la conocemos y sabemos que es capaz de tragar cualquier porquería, salimos tras ella ordenándole que lo suelte.

Debo aclarar que Jara es una perra estupenda, muy dócil, obediente, un encanto, pero ni siquiera un adiestrador profesional fue capaz de quitarle la manía de obedecer en ese tema: si engancha algo por ahí no hay forma de que lo escupa.

Se lo zampa todo, sea comestible o no.

Y, además, es cabezota como ella sola, no importa si la riñes o si le das un coscorrón, tiene toda la bendita tozudez de los perros de caza.

Total, que casi nos da un yuyu cuando vemos que lo que se ha zampado es una bolsita de veneno.

Afortunadamente encontramos más bolsas por ahí y cogimos una de muestra, para que la veterinaria viera su composición, y salimos zumbando.

La vete nos dijo que no era un veneno demasiado agresivo, que se trataba de un producto que producía hemorragias

(qué horror!!) pero dada la pequeña dosis se trataba simplemente empachando a Jara con vitamina K dfurante varios días.

Para asegurarse de que la bichita no digería todo el veneno, la hizo vomitar.

TRUCO: para los que tengáis perros tragones, de estos que pegan sustos zampándose cualquier barbaridad, si necesitáis urgentemente que vomiten, dadles agua oxigenada con una jeringa.

Es inocuo, simplemente les da asco y acaban echando las papas.

(A Jara hubo que darle en cantidades industriales, qué tía, qué estómago!!!) En fin, que al final logramos que vomitara, y cuántas bolsitas de veneno se había tragado, la muy insensata??? SIETE!!!!! Menos mal que la pillamos comiéndose la

última, si no.

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no lo quiero pensar.

La buena noticia es que con el tratamiento, Jara está como una rosa.

La mala noticia

(para ella) es que, visto que no hacemos carrera de ella, le hemos comprado un bozal.

Y cada vez que hace intentos de zamparse algo sin permiso, se lo ponemos.

No sabemos si aprenderá la lección, pero al menos la protegemos de su gula!!!!