No me enfado para nada, Bowman.

La serie de Benítez se llamaba

"Planeta Encantado" por algo.

La mayoría de las

"afirmaciones" que cita Gámez, nunca lo han sido.

Benítez es un señor con una imaginación bastante considerable, escribe y cuenta historias.

Puede gustarte, aburrirte o entretenerte.

Puede parecerte un fantoche o encantarte.

La cuestión es que nadie obliga a ver sus programas, leer sus novelas o escucharle en la radio.

Es opcional.

Que Gámez tergiverse y haya afirmado en muchas ocasiones que Caballo de Troya es falso, es para troncharse.

Claro que es falso.

Y El Señor de los Anillos.

Benítez está hasta el gorro de decirlo: es una novela.

Una ficción sobre el personaje de Jesucristo.

Nada más.

Agarrarse los berrinches que se agarra el Gámez

(un día le dará un yuyu) no tiene sentido.

Es como poner verde a Stephen King porque Carrie no existió.

O desacreditar a Randall Wallace por las buenas dosis de imaginación que le echa a la novela sobre su antepasado William.

NOVELA.

Creo que queda claro.

Montar un pollo porque Benítez, Iker, Del Oso o quien sea tengan o tuvieran espacios en radio y televisión me parece una chorrada.

Yo también podría montar el pollo por la retransimisión de la Santa Misa o los pasos de Semana Santa y demandar a los sacerdotes por afirmar que un señor se murió y a los tres días resucitó, cosa que, cintíficamente, es altamente improbable.

Pero es que no le veo sentido.

Es cuestión de fe y me importa un comino.

Con no ir a misa, o poner otro canal, lo tranquila que vivo, oiga.

Pues el Iker habla de fantasmas y el Benítez pone a Jesucristo a viajar en el tiempo.

Al que le interese o le entretenga, que lo disfrute.

Al que no, que no mire.

En cualquier caso, este señor, Gámez, no puede negar que llamó a Benítez

"estafador" y

"mentiroso" entre otras perlas, y que incluso se atrevió a meterse en su vida privada y familiar.

Así que entiendo que el caso por delito contra el honor

(o como se llame) saliera adelante.

Ya dije en su día que Gámez me parece pelín patético por su manía paranoica a atacar a esta gente.

Puede que Iker viva, como los antiguos feriantes, de contar historias de fantasmas, pero es que el tal Gámez vive de atacar a Iker y a otros muchos.

Si no fuera por todos estos

"paranormales", Gámez se aburriría mucho.

Es un pataleo constante, un ataque constante, es cansino.

No vive, el tío, no lo resiste, es que se pone malo.

Le revienta que escriban libros, que salgan en la tele, se pone del hígado.

Es como la colegiala que quería ser actriz y al final ve cómo le dan el Oscar a su compañera de pupitre, es que escupe la bilis.

No entiendo tal inquina, de verdad, suena a envidia de las tiñosas.

Él, y otros como

él, parecen haberse erigido en iluminados y se han empeñado en salvarnos, porque, como somos todos idiotas, no nos da la cabeza para distinguir realidad de ficción.

Se justifican en nuestra imbecilidad, como si uno no pudiera ver a Iker sin creerse nada.

Porque yo, por ejemplo, no me creo nada.

Y eso no quita para que disfrute como una enana con los cuentos de aparecidos.

Así que no necesito que me llamen imbécil ni que se justifiquen conmigo.

Y es que, encima, cometen el error, muchas veces, de meterse con los menos indicados.

Porque la mayoría de los aficionados a lo paranormal que conozco, son rematadamente escépticos.

Estudian estos temas para poder decir que son fraude o leyenda urbana.

Y, cuando no logran demostrarlo, ni siquiera dicen

"esto es un fantasma", sólo dicen:

"de momento no sabemos qué es, seguimos investigando".

Llevo años oyendo a los de La Rosa de los Vientos, y todavía no les he oído JAMÁS confirmar un suceso paranormal, como no sea el de Bélmez, del que sólo dicen:

"aún no está claro qué leñes es".

Al revés, se pasan la vida negando.

La frase que más les oigo es:

"no, era mentira, era fraude.

No, es una leyenda urbana.

No, no, qué va, era un avión militar.

El Yeti??? Qué va, si era un oso!!" Vale que hay gente que se tira más el rollo, como Iker, siempre

"olvidando" que tal caso se demostró que era fraude, siempre creando ambientito chungo.

Pero esto es como en todo, hay clases, estilos.

En el mundillo se sabe y se hacen no pocas coñas.

Y al final, es lo de siempre.

Hay quien no cree y se divierte igual, quien pasa del tema, quien cree

(y la fe es libre, allá ellos) y quien ni cree ni deja de creer.

Pero de verdad que lo del Gámez este es digno de estudio.

No puede vivir sin ellos.

De hecho, vive de ellos.

Para que luego hable de oportunismo!